Primero fue La Diablada; ahora, Bolivia reclama como parte de su patrimonio al Ekeko, una deidad venerada por los pobladores del Altiplano y que, según la tradición, ahuyenta la desgracia de los hogares y atrae la fortuna. Pero no solo eso: las autoridades y diversos estudiosos bolivianos han ido más allá y han acusado al Perú de intentar apropiarse de su patrimonio cultural.
De acuerdo con una publicación del diario La Prensa, de La Paz, el director del Museo de Arte de Bolivia, Édgar Arandia –quien ha investigado el tema–, sostiene que el Ekeko tiene su origen en Tiwanaku, pero en la parte del territorio boliviano. El estudioso afirma que se trata de una divinidad de la fecundidad, y no de la fortuna, como es considerada por los pobladores peruanos, pues se ha hallado evidencias antiguas que muestran a la imagen con el miembro viril erguido. Además, “aunque el Ekeko formaba parte de la jerarquía de los incas, su origen no es incaico, sino tiwanacota”.
El oficial mayor de Culturas de la Alcaldía de La Paz (Bolivia), Walter Gómez, señaló que lo sucedido con el Ekeko es similar a la controversia despertada con La Diablada. “Es prácticamente lo mismo. Hubo un tiempo en que los artesanos de Bolivia fueron a otros países y llevaron sus productos. Los otros países se adueñaron de lo nuestro y, por eso, ahora hay estas controversias”, aseveró.
El funcionario agregó que prueba de ello es que la fiesta de las Alasitas –que se celebra en los pueblos del Altiplano– se realiza en Bolivia desde hace más de un siglo, mientras que en Puno no tiene más de 50 años. “En Perú se mueve mucho dinero para el apoyo al turismo; mientras que en Bolivia no. A ellos les conviene ofrecer al Ekeko como si fuera patrimonio suyo”, comentó.
RESPUESTA. Ante el reclamo boliviano, el historiador puneño José Morales dijo a Perú.21 que la imagen es parte de la cultura altiplánica. Indicó que su origen se remonta a los tiempos de la cultura Pucará, antes de Tiahuanaco, y ahora se ha convertido en un elemento propio de la cosmovisión andina. “Muy pronto, los bolivianos dirán que el pago a la tierra es solo de ellos. No pudieron con La Diablada y ahora quieren el Ekeko”, sostuvo.
En tanto, la Federación Regional de Folclor y Cultura de Puno aclaró que el Ekeko es una manifestación cultural que comparten Perú y Bolivia. “El patrimonio cultural lo hacen los pueblos, el mismo que se hereda y se aprende de generación en generación; por lo tanto, no podemos decir esto es mío y me pertenece solo a mí”, enfatizó Yenni Silva, presidenta de la entidad.
Consultado por este diario, el congresista por Puno Yonhy Lescano calificó el reclamo como una muestra más de hostilidad contra el Perú por el deseo de Bolivia de obtener una salida al mar. “Me parece un error, una manipulación y un nuevo intento de apoderarse de lo que no les corresponde. El Ekeko es precolombino y producto del mestizaje. Es parte del Altiplano. El INC debería tomar cartas en el asunto porque se trata de un patrimonio que hay que defender”, sentenció.
DATOS
La Alcaldía de La Paz pidió a las autoridades de Bolivia que aceleren el trámite para postular la festividad de Alasita como Patrimonio de la Humanidad ante la Unesco.
Aproximadamente hace un mes, la entidad edil envió documentación al Ministerio de Cultura para avanzar el referido trámite.
Fuente: Peru21