El fútbol esta de luto. Y es que un deportista con mucho talento, mucha actitud; pero sobre todo con muchas ganas de vivir ha dejado de existir. La tragedia golpeó ayer a Daniel Jarque, defensa central del Espanyol, que falleció de forma inesperada Italia, donde el equipo blanquiazul estaba de pretemporada. Un fulminante ataque al corazón acabó con su vida.
El futbolista se hallaba en la habitación del hotel, conversando por el teléfono con su novia, que está en la recta final de su embarazo. Pero, de repente, Jarque se desplomó. La fémina, asustada, llamó entonces a un compañero del equipo -Corominas, también de cuarto e íntimo amigo del central- para alertarle de que no le respondía, señaló entre sus líneas el diario el País de España.
Al subir Corominas a la habitación, junto con el delegado del equipo, José María Calzón, inquietos ambos porque no era una actitud normal en Jarque, se encontraron al jugador en el suelo. Y es que había sufrido una asistolia que había acabado con su vida.
Jarque estaba pasando por su mejor momento deportivo, una vez que el técnico, Mauricio Pochettino, le había escogido como capitán del equipo. “Es un orgullo y un reto defender la camiseta del Espanyol. Llevar el brazalete es un sueño hecho realidad”, aseguró hace dos semanas Jarque, que dedicó toda su vida al club blanquiazul.
Sus compañeros del Espanyol prefirieron mantenerse en silencio, consternados por la peor de las noticias posibles. Jaime Lissavetzky, secretario de Estado para el Deporte, ofreció todo su apoyo al club para tratar de agilizar los trámites y contactar con el embajador español en Italia, Luis Calvo, y el cónsul, Eduardo de la Iglesia.
El futbolista desaparecido fue trasladado al hospital general de Florencia, donde le harán la autopsia. Allí se quedaron el delegado Calzón y el médico Cervera a la espera de los resultados y de poderlo repatriar. El Espanyol decidió suspender la gira italiana. Tenía previsto para hoy un partido amistoso contra el Bolonia, pero regresará esta tarde a Barcelona.
Por su parte, los seguidores Jarque llegaron hasta la puerta 21 del nuevo estadio españolista para unirse al duelo por la muerte del defensa central del Espanyol y depositar velas, bufandas y banderas.
EFE