Tras una vida enmascarados y en la sombra, los hijos de Michael Jackson reivindicaron a cara descubierta la figura de su padre en su homenaje, un debut ante las cámaras que acabó con los esfuerzos del “rey del pop” para protegerlos de la mirada pública.
Sentados en primera fila junto al resto de la familia, Michael Joseph Jr., de 12 años -apodado Prince Michael-, Paris Michael Katherine, de 11 años, y Prince Michael II, de 7 años, terminaron por acaparar el protagonismo de la ceremonia celebrada en Los Ángeles en honor a Michael Jackson y transmitida a todo el mundo.
Más de dos horas de espectáculo en el que actuaciones de Mariah Carey o Stevie Wonder alternaron con emotivos discursos de amigos del artista, pero que quedaron eclipsados cuando una afligida Paris tomó la palabra sobre el escenario rodeada de sus tíos.
“Desde que nací, papá ha sido el mejor padre que jamás se podría imaginar y solo quería decir que lo quiero mucho”, declaró entre sollozos la hija del “rey del pop”.
Apenas 25 conmovedores segundos sirvieron para transformar a Paris Jackson, y por extensión a sus hermanos, de extraños niños criados a la sombra de un padre extravagante y muy reservado en personajes públicos que reclaman su lugar en el “circo” mediático.
Un giro copernicano en la vida de los menores Jackson, principales herederos junto con su abuela Katherine de la fortuna del cantante, que se produjo tan solo 13 días después de la desaparición de su padre, quien siempre intentó mantener a sus hijos lejos de los paparazzi para darles la infancia que él no tuvo.
El pequeño discurso de Paris pronto se convirtió en un vídeo con miles de visitas en Internet, donde fue muy comentado y se creó un debate en torno a la espontaneidad de su testimonio.
La repentina exposición ante los ojos de medio mundo de los pequeños Jackson llevó a muchos usuarios de la red social Twitter a dudar de la naturalidad de la hija mediana del “rey del pop” y se especuló con que habría sido “animada” a participar.
Además de los fans, han habido psicólogos infantiles que criticaron la aparición de los niños en la primera línea del foco informativo y aseguraron que la familia cometió un error al dejar que Paris hablara para la audiencia por ser una experiencia traumática.
Los expertos señalaron que cuando los niños sufren una situación dramática como la muerte de uno de sus progenitores, lo recomendable es mantener, en la medida de lo posible, un ambiente de normalidad en sus vidas para facilitar la asimilación de la pérdida del ser querido.
Una idea que no encaja con subir a un escenario y manifestar su tristeza ante un estadio abarrotado de gente, lo mismo que quiso evitar la actriz y amiga íntima de Jackson, Elizabeth Taylor, quien rechazó la invitación a tomar parte en el homenaje público.
“No creo que Michael quisiera que compartiera mi pena con millones de personas”, aseguró Taylor en la víspera de la ceremonia celebrada el martes en el pabellón Staples Center, donde juega habitualmente el equipo de baloncesto de Los Ángeles Lakers.
Los hijos de Jackson son parte del misterio que rodeó al “rey del pop”.
De piel blanca, a pesar de que Michael Jackson es afroamericano, y nacidos de dos madres distintas con las que el artista acordó económicamente la cesión de la custodia, los hasta ahora poco conocidos descendientes del cantante están llamados a llenar muchas páginas de revista.
El próximo lunes 13, un juez de la Corte Superior del condado de Los Ángeles tendrá que decidir quién se hará cargo de la custodia de los niños, ahora tutelados provisionalmente por su abuela Katherine, de 79 años.
La ex mujer de Jackson, Deborah Rowe y madre de Prince Michael y Paris podría reclamar el control sobre ellos y dar origen a una dura batalla legal.
El más pequeño, Prince Michael II, también llamado Blanket, fue dado a luz por un vientre de alquiler.
En su último testamento, Jackson concedió la custodia a su madre, Katherine y en su defecto a la cantante Diana Ross -quien tampoco asistió al homenaje póstumo-, y excluyó explícitamente de cualquier herencia a Rowe.
Los tres hijos del artista son los destinatarios del 40 por ciento de la riqueza dejada por el “rey del pop”.
EFE