Por Alexander Bustillos B.
Nadie se quiere perder un partido de la Copa Libertadores. El buen comienzo íntimo en el torneo continental ha motivado a los jugadores: ni lesionados quieren dejar su puesto. Ese es el caso de Henry Quinteros.
El ‘Pato’ fue, durante la semana, el dolor de cabeza de Gustavo Costas. La molestia en la planta del pie persistía y hasta ayer su presencia estaba en duda y preocupó al técnico que, en este momento, carece de volantes en primera línea.
Pero las dudas se zanjaron ayer: Quinteros se paró al lado del ‘Negro’ González en la mitad de la cancha y literalmente ‘la rompió’. Su claridad para armar fútbol es vital en el esquema de ‘Costitas’, quien ayer, al verlo en ese nivel, se sintió aliviado.
Lo cuidan como oro
A un día del partido con Aurich, Costas no arriesgará más a Quinteros, quien culminada la práctica de anoche fue al departamento médico para realizar su terapia de rehabilitación y no sentir molestias en el partido.
En el peor de los casos, Costas tiene pensado un plan ‘B’ por si el ‘Pato’ no llega a recuperarse: en ese caso, Alexander Sánchez y Jhonier Montaño son las primeras opciones para reemplazarlo y Jean Tragodara bajaría a la primera línea de volantes.
Costas deberá rezarle a todos los santos para que ni Quinteros ni Édgar González se lesionen.