
La cantante Amy Winehouse ha abandonado la clínica londinense donde estaba ingresada a fin de cumplir con su gira musical en Europa del Este a finales de este mes.
Winehouse, que ha tenido problemas en el pasado con el alcohol y las drogas, había ingresado la semana pasada en la conocida clínica Priory, en el suroeste de Londres, informa hoy la cadena BBC.
“Ella quisiera hacer llegar el agradecimiento a todos sus seguidores por los mensajes de apoyo que ha recibido”, agregó.
El pasado octubre, Winehouse había afirmado que llevaba tres años sin drogas.
VOLUNTAD PROPIA
Winehouse, de 27 años, se internó por propia voluntad el fin de semana pasada en una clínica británica antes de embarcarse en varios conciertos en Europa, informó Tracey Miller, publicista de la cantante.
“Quiere estar lista para sus actuaciones en Europa este verano y decidió buscar ayuda. Permanecerá en Priory bajo consejo médico”, había dicho.